Ayer fue uno de esos días en los que estas hachada en el sofá, leyendo un libro no tan bueno y tomando esos mates lavados y llenos de edulcorante que solo los aguantas porque no tenés a nadie que te diga que le cambie la yerba.
Ya han de saber, que la soledad es mi enemiga, no porque me haga sentir mal, no, nada por el estilo, soy ese tipo de persona que es social y estar mas de una hora sin hablar con nadie las mata.
El hecho es que si, estaba sola y aburrida en mi viejo sofá, así que de chancletas y short subí tres pisos para ir al 14 “a” a lo de mi amiga Alma.
Cuando entre, al abrir la puerta comenzó a sonar un llamador de ángeles, para lo que no lo conocen, les cuento que (como dice mi chico) es una hipada que hace ruidito como de iglesia o almacén chino. Cuando lo vi no me pareció raro que este ahí, hace tres meses ese aparatejo hizo furor en las tiendas. Empecé a percibir un aroma a jazmines pero este era mas dulzon, y vi la foto de Damián pegada en un espejo.
Alma apareció frente a mi, estaba vestida de rojo de pies a cabeza y llevaba un turbante tipo árabe de un bello carmesí... le pregunte que pasaba, porque llevaba hojas en las manos y estaba vestida tan ridícula.
-“cállate!”- dijo y me tomo de la mano llevándome hacia el comedor. Había armado un altar con la foto de Damián a la cabeza, flores, perfumes y velas de todos los colores.
Puso música de cámara y empezó a rezar, no se si lo hacia en portugués en hebreo o jeringozo, la verdad es que quede helada ante esta adoración.
Así como si nada, una vez terminado, guardo sus las flores y perfumes uno a uno en sus cajitas negras correspondientes y sonriendo me dijo “con tres veces mas, éste va a volver” y se perdió en la habitación.
Puse la pava a fuego lento, prepare la mesa y cambie la música, Alma apareció y se sentó mirándome con sus enormes ojos negros fijos en mi; debo confesar que me sentí bastante incomoda, pero la curiosidad (y ese afán de hablar) me ganó.
-Alma,¿qué es eso que hiciste recién? ¿Sos bruja? ¿O directamente te volviste completamente chiflada?-
Empezó a reír como loca y me explico que hacia unos 5 días una gitana había tocado su timbre diciéndole que solo por esta vez le leería la fortuna gratis, la tomo de la mano e increíblemente le contó todo lo que estaba sucediendo en su vida, le dijo que estaba enamorada de u muchacho muy guapo, que es una persona excelente, pero que su corazón esta indeciso porque no sabe si esta preparado aun para afrontar tremendas decisiones que con ella, en un futuro lo debería hacer. También le dijo que se tenia que quedar tranquila que todo el sufrimiento que vivió, y por esa persona que tanto lloro no merece sus lagrimas ya que no son correspondidas, “él no servia para vos, por eso se fue como las palomas” cometo la gitana.
La verdad es que esta mujer tenia razón, le había dicho la verdad y le enseñó por el módico precio de $250 como hacer que su amor se de cuenta que Alma es la mujer de su vida en solo tres días... todo una Ganga.
Úrsula, cambiemos de tema dijo y rápidamente comenzó a hablar del trabajo, cuando la charla se hizo densa, y mi estomago quedo completamente verde me despedí jurando en silencio volver al tercer día.
El jueves llegó, a las 18 se cumplirían las 72 hrs. en las que debía hacer efecto el hechizo así que a las 17.00 corrí a la casa de Alma, convencida que al abrir la puerta la vería enredada en los brazos de Damián.
Entré, estaba sentada en la punta de la mesa con uno de sus mejores trajes, y con cara de impaciencia esperando que Damián toque la puerta.
Se hicieron las 22, todavía estábamos esperando por si las dudas el hechizo no era puntal. Hoy es martes, creo que Alma todavía esta esperando que su amor toque la puerta, yo por mi parte, preferí estar en casa, sentada en la compu pensando que uno no puede creer todo lo que escucha.
Tal vez, en épocas de desesperación, el humano necesita tener fe y pensar que las cosas se hacen por obra de magia, tal vez nos creemos tan superiores y somos tan egoístas como para no entender que a veces no somos lo mejor para los demás (aunque quisiéramos serlo) y que no porque queramos los demás tienen que ser nuestros.
Dios o quien quiera que sea, nos creo libres, libres para elegir, libres para tomar decisiones y libres para amar, recibiendo y brindando como uno libremente desee todo lo que tiene para dar.
Ojala Alma algún día se de cuenta que no tiene que esperar sentada a que toquen su puerta, que si desea algo tiene que salir a tomarlo, con fuerzas, con pasión y respeto. Ojala se de cuenta que uno no puedo forzar a los demás a elegir, que las cosas suceden porque tienen que suceder y que la vida te quita y te dá solo en la justa medida que tu ser lo pueda aguantar.
Ya han de saber, que la soledad es mi enemiga, no porque me haga sentir mal, no, nada por el estilo, soy ese tipo de persona que es social y estar mas de una hora sin hablar con nadie las mata.
El hecho es que si, estaba sola y aburrida en mi viejo sofá, así que de chancletas y short subí tres pisos para ir al 14 “a” a lo de mi amiga Alma.
Cuando entre, al abrir la puerta comenzó a sonar un llamador de ángeles, para lo que no lo conocen, les cuento que (como dice mi chico) es una hipada que hace ruidito como de iglesia o almacén chino. Cuando lo vi no me pareció raro que este ahí, hace tres meses ese aparatejo hizo furor en las tiendas. Empecé a percibir un aroma a jazmines pero este era mas dulzon, y vi la foto de Damián pegada en un espejo.
Alma apareció frente a mi, estaba vestida de rojo de pies a cabeza y llevaba un turbante tipo árabe de un bello carmesí... le pregunte que pasaba, porque llevaba hojas en las manos y estaba vestida tan ridícula.
-“cállate!”- dijo y me tomo de la mano llevándome hacia el comedor. Había armado un altar con la foto de Damián a la cabeza, flores, perfumes y velas de todos los colores.
Puso música de cámara y empezó a rezar, no se si lo hacia en portugués en hebreo o jeringozo, la verdad es que quede helada ante esta adoración.
Así como si nada, una vez terminado, guardo sus las flores y perfumes uno a uno en sus cajitas negras correspondientes y sonriendo me dijo “con tres veces mas, éste va a volver” y se perdió en la habitación.
Puse la pava a fuego lento, prepare la mesa y cambie la música, Alma apareció y se sentó mirándome con sus enormes ojos negros fijos en mi; debo confesar que me sentí bastante incomoda, pero la curiosidad (y ese afán de hablar) me ganó.
-Alma,¿qué es eso que hiciste recién? ¿Sos bruja? ¿O directamente te volviste completamente chiflada?-
Empezó a reír como loca y me explico que hacia unos 5 días una gitana había tocado su timbre diciéndole que solo por esta vez le leería la fortuna gratis, la tomo de la mano e increíblemente le contó todo lo que estaba sucediendo en su vida, le dijo que estaba enamorada de u muchacho muy guapo, que es una persona excelente, pero que su corazón esta indeciso porque no sabe si esta preparado aun para afrontar tremendas decisiones que con ella, en un futuro lo debería hacer. También le dijo que se tenia que quedar tranquila que todo el sufrimiento que vivió, y por esa persona que tanto lloro no merece sus lagrimas ya que no son correspondidas, “él no servia para vos, por eso se fue como las palomas” cometo la gitana.
La verdad es que esta mujer tenia razón, le había dicho la verdad y le enseñó por el módico precio de $250 como hacer que su amor se de cuenta que Alma es la mujer de su vida en solo tres días... todo una Ganga.
Úrsula, cambiemos de tema dijo y rápidamente comenzó a hablar del trabajo, cuando la charla se hizo densa, y mi estomago quedo completamente verde me despedí jurando en silencio volver al tercer día.
El jueves llegó, a las 18 se cumplirían las 72 hrs. en las que debía hacer efecto el hechizo así que a las 17.00 corrí a la casa de Alma, convencida que al abrir la puerta la vería enredada en los brazos de Damián.
Entré, estaba sentada en la punta de la mesa con uno de sus mejores trajes, y con cara de impaciencia esperando que Damián toque la puerta.
Se hicieron las 22, todavía estábamos esperando por si las dudas el hechizo no era puntal. Hoy es martes, creo que Alma todavía esta esperando que su amor toque la puerta, yo por mi parte, preferí estar en casa, sentada en la compu pensando que uno no puede creer todo lo que escucha.
Tal vez, en épocas de desesperación, el humano necesita tener fe y pensar que las cosas se hacen por obra de magia, tal vez nos creemos tan superiores y somos tan egoístas como para no entender que a veces no somos lo mejor para los demás (aunque quisiéramos serlo) y que no porque queramos los demás tienen que ser nuestros.
Dios o quien quiera que sea, nos creo libres, libres para elegir, libres para tomar decisiones y libres para amar, recibiendo y brindando como uno libremente desee todo lo que tiene para dar.
Ojala Alma algún día se de cuenta que no tiene que esperar sentada a que toquen su puerta, que si desea algo tiene que salir a tomarlo, con fuerzas, con pasión y respeto. Ojala se de cuenta que uno no puedo forzar a los demás a elegir, que las cosas suceden porque tienen que suceder y que la vida te quita y te dá solo en la justa medida que tu ser lo pueda aguantar.
